Domenico Gnoli

.

.

Hoy traigo a este blog la obra de un artista con una memoria visual impresionante, que miraba las cosas con ojos de niño -para descubrir el sentido y el misterio- y representar luego la realidad, hasta alcanzar momentos oníricos.

Domenico Gnoli (1933 - 1970) hijo de un historiador del arte y superintendente de la Academia de Perugia y de madre ceramista, recibió una educación artística en casa, profundizada luego en la escuela de C.A. Petrucci. "Nací sabiendo ya que sería ser pintor. Mi padre me presentó la pintura como la única cosa aceptable”.

Después de haber expuesto dibujos en Roma y Bruselas, durante la década de 1950 trabajó como escenógrafo de teatro en Italia, París y Londres, y como ilustrador para varias revistas. En 1956 se fue a vivir a Nueva York (aunque viajaba con mucha frecuencia a Italia) y se dedicó principalmente a la pintura.
Entre 1955 y 1962 vivió en Nueva York, donde trabajo sobre todo como pintor y alcanzando fama y consolidando su trayectoria con un repertorio propio gracias a sus conocimientos de los gustos y las temáticas del Pop Art.

La fuerza del simbolismo de Gnoli se oculta bajo simples detalles, como aumentados con una lupa. Las gigantescas imágenes de los cuadros del nudo de corbata, el rizo de cabello, el corazón de manzana o las telas de butacas son claro ejemplo de ello.